Política tributaria
Friday 03 June, 2011
Arturo Alvarado
El Heraldo, Honduras
Una buena política tributaria descansa en esquemas que sean transparentes y predecibles; pocos impuestos pero con amplia base de contribuyentes; tasas que sean competitivas y razonables; con equidad horizontal y vertical; eliminan la doble imposición; combaten la evasión sin distingo alguno.
En el caso de Honduras, lo que menos tenemos es una política transparente y predecible, ya que las decisiones tributarias están sujetas a intereses económicos y de política vernácula. De hecho, lo que tenemos es una política que reacciona ante los excesos electoreros cuando se aprueban gastos y prebendas sin financiamiento y exoneraciones y exenciones fiscales.
En otras palabras se pierde la disciplina fiscal y entonces al tomar posesión un nuevo gobierno no tiene más remedio que tomar medidas tributarias para balancear el presupuesto público. Esto conlleva a un clima de incertidumbre, donde una empresa que invierte en Honduras después se encuentra con la desagradable sorpresa que el marco tributario se le modifica constantemente; de hecho podemos decir que cada cuatro años.