Brasil – Argentina

 

Ambas naciones vienen dando muestras de un verdadero desarrollo político y popular; sus máximos dirigentes exponen sus capacidades de conductores con un alto espíritu renovador, apegados a las más altas reivindicaciones sociales. No les ha faltado sus buenas relaciones de vecindad, y para el resto del Continente.

 

Lula ha consolidado sus proyectos en las pasadas elecciones; la mandataria argentina en condiciones difíciles, demostrará sus capacidades políticas durante el resto de su gobierno y en el partido peronista, de frente a los comicios próximos, para los cuales ha recibido el respaldo multitudinario del pueblo ante la pérdida de su predecesor y compañero.

 

Aunque con un verdadero mosaico, el cono sur americano está forjando la unidad definitiva, inspirada por Bolívar. También en México, Centroamérica y el Caribe hay muestras similares, además, las proyecciones y vaticinios económicos respaldan esta realidad, indispensables para nuestros pueblos.

 

Panamá, sede del Congreso Anfitriónico Bolivariano, no fallará en una Latinoamérica cada día más definida, más consciente de la unidad que sus pueblos reclaman, y sus respectivos Gobiernos consolidan progresiva y coyunturalmente.

 

En su reclamación sobre el recurso fundamental del Canal, nuestra nación recibió el espaldarazo, y el reconocimiento latinoamericano de su cruenta lucha por la soberanía y bienestar.