Desplome del café enluta a El Salvador

El cultivo del café en El Salvador era un ejemplo para el mundo por su producción y la calidad en la investigación. Ahora quedó entrampado en una crisis donde lo urgente es también lo importante.

Antes de la guerra civil en los años ochenta, la producción superaba los 4 millones de quintales, pero para este año la previsión del gobierno es que no pase de 833 mil.

Detrás de las pérdidas que enfrentan los productores año con año, también hay cuando menos 40 mil trabajadores en la zona rural que no tendrán ingresos para llevar a su familia. Además, el país debilita su principal fuente natural de agua y agota su bosque.

El Ministerio de Agricultura y Ganadería calcula que la producción 2015/2016, que está a media corta, será menor a la cosecha anterior, entre 10 y 12%.

Las gremiales de beneficiadores y las gremiales de productores han puesto en duda estas previsiones y desde el sector privado temen que la cosecha dejará, como máximo, 650 mil quintales de café.

De acuerdo con la Fundación Salvadoreña para Investigaciones de Café, en los noventa la producción llegó a 4.3 millones de quintales.

Desde entonces no ha superado, ni siquiera igualado, esa cantidad.

En la década de los setenta la producción llegó incluso a 4.8 millones de quintales.

La investigadora Amy Ángel, del instituto de estudios económicos, Fusades, dijo que, después de la guerra civil, la baja de precios internacionales de café que inició en 1999 provocó que otra cantidad de productores de café abandonara la actividad.