Ford coloca la cereza en pastel automotriz de México

Ford construirá una nueva planta de ensamble en México y aumentará su capacidad productiva en el país.

La decisión de la emblemática empresa estadounidense representa el último cambio en las inversiones que realiza en el extranjero uno de los tres fabricantes de autos de Detroit tras la firma de un nuevo acuerdo laboral.

Ford proyecta incrementar su capacidad productiva en México en medio millón de unidades a partir de 2018, más del doble de la producción de vehículos que realizó el año pasado allí.

El plan de expansión en el país refleja el de General Motors que con una inversión de $5 mil millones ambién planea duplicar su capacidad productiva instalada en México para 2018.

El nuevo complejo de Ford se edificará en San Luis Potosí, al tiempo que la empresa también planea ampliar la fábrica que tiene a las afueras de la Ciudad de México.

México ha logrado atraer a decenas de miles de millones de dólares en compromisos de inversión para la industria automotriz en los últimos años, gracias a sus salarios bajos, a las mejoras en su infraestructura de transporte y distribución y al arsenal de acuerdos de libre comercio con que cuenta el país.

La mayoría de los principales fabricantes mundiales de automóviles en los últimos años abrieron nuevas plantas de ensamble en México o anunciaron planes para una, incluyendo a los fabricantes BMW, Volkswagen y Toyota Motor.

Honda Motor comenzó recientemente a producir su vehículo subcompacto Fit en México. Kia Motors, de Corea, también abrirá por primera vez en México una fábrica de automóviles pequeños.