Inmigrantes
Wednesday 15 June, 2011
Julio Ligorría Carballido
La Prensa Libre, Guatemala
Tres ejes sobresalen en el renovado discurso del presidente Obama: legalizados, los migrantes pueden ser un eje de financiamiento del Estado y aligerarían la pesada carga presupuestaria. Incorporarlos como sujetos tributarios implica seis billones de dólares frescos para el gobierno norteamericano.
Pero adicionalmente, la sola promesa de reabrir el tema traza una línea de cumplimiento que levanta expectativas entre los inmigrantes y el voto hispano. El presidente busca cómo aumentar su capital político rumbo a las próximas elecciones, una maniobra políticamente correcta pero que implica un desgaste grande si no se alcanzan los resultados esperados por la masa de inmigrantes.
Un tercer eje no visible es el proceso de distensión social que implica el cambio de dinámica social entre migrantes y norteamericanos. Si la reforma logra reducir la brecha entre los indeseables y advenedizos y los locales, el proceso de incorporación podría tomar quizá unos 15 años, pero solventaría una de las razones de tensión social importantes.