Los maestros, el INPREMA y la Nueva Ley

Miguel Osmundo Mejía E.
La Tribuna, Honduras

El Instituto Nacional de Previsión del Magisterio INPREMA nació el año 1971 y funcionó inicialmente entre la primera y segunda avenidas de Comayagüela a pocas cuadras del parque El Obelisco, un edificio muy pequeño pero con un personal dispuesto a atender al magisterio nacional, su primer director fue el abogado Arturo Castellanos nombrado por el gobierno militar de esa época, ese mismo año nació el tercer colegio magisterial, el Colegio de Profesores de Educación Media de Honduras COPEMH, ya existía el Colegio Profesional Superación Magisterial Hondureño, COLPROSUMAH fundado 1963, luego unos años después el PRICHMA, le siguieron el Colegio Profesional Unión Magisterial COPRUMH, el Sindicato Profesional de Docentes de Honduras SINPRODOH, conformado en sus inicios por maestros sin título pero en período de profesionalización y los graduados de la Escuela de Pedagogía de la Universidad Nacional que formaron el Colegio de Pedagogos de Honduras COLPEDAGOGOS, hoy en día las seis organizaciones por medio de sus dirigencias y los gobiernos de turno, son parte responsable de la situación que provocó la intervención y la promulgación de una nueva Ley del INPREMA.

Al parecer desde los primeros años de vida de esta institución de previsión social la corrupción se apoderó de ella, recuerdo hace más de 32 años en octubre de 1979, en primera plana apareció en este rotativo el titular “Despilfarro de fondos en el INPREMA” producto de una denuncia documentada formulada por este servidor, en ese tiempo representábamos un grupo al interno del COPEMH y como candidato a la presidencia del mismo, esas denuncias ocasionaron que nos procesaran por calumnia pero se hizo justicia y nuestro caso fue sobreseído favorable a nosotros porque encontraron indicios de corrupción en la compra de unos terrenos, no se siguieron las investigaciones y hasta allí llegaron nuestras intenciones, perdimos las elecciones mi ex alumno Amílcar Tomé ganó las elecciones y las cosas siguieron igual.

Conociendo en parte todo lo que ha venido sucediendo en el INPREMA y como beneficiarios del mismo, considero que la Nueva Ley era necesaria, nos consta como el instituto, con la complicidad de los diferentes gobiernos, han permitido que los dirigentes magisteriales se hayan venido repartiendo los cargos como si fuese un botín, por allí pasaron jefes de créditos, contralores o tesoreros sin ser peritos mercantiles, maestros sin conocer nada de administración y finanzas, siempre los secretarios ejecutivos fueron del COLPROSUMAH y el subsecretario de otro colegio no importando si tuviesen formación académica administrativa, luego repartían los cargos intermedios a los recomendados de cada colegio magisterial, esperamos eso sea historia. Muy diferente es lo que dice el Artículo 4 de la Nueva Ley, sobre la Asamblea de Participantes y Aportantes, donde el Estado tendrá seis de los 16 representantes, la administración a cargo de tres directores especialistas profesionales en el ramo y algo muy importante es que se eliminan las dietas y se establece que tanto los miembros de la asamblea como los directores tienen responsabilidad civil, administrativa y penal (Artículo 20).

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