Nueva movilidad internacional
Wednesday 07 December, 2011
Eduardo Cálix
La Prensa Gráfica, El Salvador
La tendencia actual en materia de movilidad internacional indica que la sociedad internacional se encuentra ante un proceso constante de movilidad global. Interpretaciones recientes utilizan el concepto para referirse a los flujos, movimientos e intercambios entre naciones más allá del movimiento humano-migratorio, ampliándola al conjunto de flujos que caracterizan la actividad humana y natural.
Las implicaciones, la dirección de esos flujos, la relocalización local y global de recursos para el desarrollo tienen carácter estratégico y consecuencias para el mundo, invitando a un nuevo proceso de prospectiva y planeación que desde una visión positiva contribuya a una estrategia global de desarrollo.
Al mismo tiempo, la construcción de un nuevo enfoque que puede ser multidimensional y que de manera simultánea recupere su característica de complejidad, la conectividad con otros fenómenos y simultaneidad respecto de la ocurrencia de cambios en patrones y flujos de todo tipo a nivel global.
Los paradigmas unidimensionales con los que se analiza el fenómeno desde diferentes campos y perspectivas requieren también ser sumados e integrados con perspectivas transversales en un nuevo tratamiento, con enfoques que permitan que desde los ámbitos de lo público y de lo privado se facilite su comprensión y, sobre todo, su gestión con nueva orientación y dirección.
La globalización y su consecuencia lógica, la movilidad internacional, es analizada desde posiciones tecnoeconómicas, socioeconómicas, políticas, geopolíticas, partidistas, religiosas, ambientales, culturales, etcétera. No obstante, existen rasgos comunes a todas las interpretaciones en el sentido de ver en la globalización una etapa avanzada de la división internacional del trabajo, la cual se caracteriza por una mayor interacción e interdependencia de los factores y actores que intervienen en el proceso del desarrollo mundial.
Por ello, el disfrute y crecimiento de los bienes sociales está directamente relacionado con la dirección de los flujos económicos, sociales, laborales, culturales y ambientales, sustentados en la movilidad de personas, del conocimiento y de las ideas.
Desde el comercio y las estrategias de sustentabilidad se invita a afirmar el soporte para los movimientos básicos de las poblaciones y de los países, y también a apoyar los nuevos flujos con nuevas infraestructuras globales que permitan satisfacer las demandas de nuevas rutas.