Ortega en enero de 2012
Wednesday 13 April, 2011
Max L. Lacayo
La Tribuna, Honduras
Muchos nicaragüenses han olvidado la creatividad y capacidad de Daniel Ortega como dictador brutal. Muchos de los empresarios políticos en Nicaragua han contribuido al mejoramiento de la imagen de Ortega. Y debido a la inexperiencia, ingenuidad e insinceridad política de los acontecimientos del 2002 y del 2006, Ortega logró emerger de los escombros políticos y recuperar fuerza y relevancia.
A medida que las elecciones del 2011 se aproximan, vale la pena revisar un posible escenario creado en base a la experiencia histórica. Nada de lo que intento presentar aquí es nuevo o producto de la imaginación. Me apego estrictamente a posibilidades reales.
El 6 de noviembre de 2011, los nicaragüenses participaremos en las elecciones presidenciales con al menos cuatro candidatos: Daniel Ortega, Arnoldo Alemán, Fabio Gadea, Enrique Quiñónez. Al final del proceso los resultados serán revelados por el Consejo Supremo Electoral: Daniel Ortega 38,8 por ciento, Arnoldo Alemán 32,4 por ciento, Fabio Gadea 24,4 por ciento, Enrique Quiñónez 3,1 por ciento, otro 1,3 por ciento. Los periódicos oficialistas pregonarán: Ortega gana en la primera vuelta. Los diarios de oposición anotarán: 61,2 por ciento de la población rechaza a Ortega.