Pemex: Fin de un monopolio

Por primera vez desde 1938, las empresas privadas - tanto extranjeras como nacionales - tendrán el derecho de desarrollar las propiedades de hidrocarburos en México, tras una decisión de la semana pasada del congreso nacional, que pone fin al monopolio de la estatal Petróleos Mexicanos.

Bajo las nuevas normas, las empresas privadas podrán adquirir licencias, que les dan el derecho para explorar y desarrollar las fuentes de energía, de forma independiente.

Las versiones anteriores de las reglas han exigido a las empresas privadas a participar en las inicitativas, junto con Pemex, un concepto que puede haber sido poco atractivo para los inversores potenciales.

Se espera que las nuevas medidas atraigan tanto como $20 mil millones al año en nuevas inversiones en el sector de gas y petróleo de México, cuya producción energética con base de los hidrocarburos, se ha reducido en una cuarta parte, desde su pico en 2004.

Al haber funcionado en gran parte como una fuente de ingresos para el gobierno, Pemex ha carecido de los recursos necesarios para invertir en nuevos procedimientos, especialmente las tecnologías de perforación en alta mar, así como la producción de gas natural eficiente.

México tiene un potencial total de hidrocarburos de 160 mil millones de barriles, según Pemex.

Las reservas probadas de crudo son alrededor de 10 mil millones de barriles, junto con 17 billones de pies cúbicos de gas, según la Administración de Información de Energía de Estados Unidos.