Señor presidente Lobo

Roberto Vallecillo
El Heraldo, Honduras

Señor Presidente yo no coincido con usted en las estrategias que ha planteado para rescatarlos de la miseria. Entienda que la única célula generadora de riqueza es la empresa y los empresarios, a los que usted se refiere como "hambreadores" del pueblo o parásitos sociales. Estos son los agentes operadores del bienestar. La práctica lo ha demostrado. 

Todos coincidimos con el fin, pero la mayoría no está conforme con su método. Ni partiendo el sueldo de los funcionarios públicos a la mitad ni evitando la corrupción que devora lo mejor de nuestro país, podremos generar la suficiente riqueza para crear los empleos que requiere Honduras, la herramienta más eficaz para ayudar a los pobres que tanto nos preocupan. Su diagnóstico está equivocado.

El gobierno encabezado por usted jamás creará los empleos que requiere Honduras ni extinguirá las mechas encendidas ni impulsará la recaudación tributaria indispensable para que el gobierno aumente significativamente el gasto en desarrollo social. Nadie podría aceptar que su tesis económica ayudará a la capitalización de las empresas ni estimulará la investigación tecnológica, ni ampliará los mercados, ni incentivará la competitividad en el comercio internacional, ni abaratará costos de producción. No tiene usted ningún derecho en detener a la inversión extranjera ni a la doméstica, que tanto necesitamos para prosperar. 

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