Viajes del presidente y nuestra realidad

Sergio Zavala Leiva
La Prensa, Honduras

Hasta el momento de escribir estas notas son ya 30 hondureños los que han perecido sumergidos bajo las aguas producidas por las lluvias diluvianas que nos han azotado en los últimos días sin ninguna piedad, resultando con ello seriamente afectada nuestra insuficiente, precaria y pobre economía nacional.

En este drama hemos visto de todo, desde aquellos siniestrados que han salvado estoicamente sus pertenencias y sus animales domésticos a riesgo de su propia seguridad, hasta los que han realizado tareas de salvamento evacuando heroicamente a personas atrapadas por el agua. Esta grave perturbación que ha afectado a los hondureños de tierra adentro en los cuatro confines del país, ha dejado además de la secuela de luto y dolor aludida, una factura por los cuantiosos daños en la población que ha perdido sus pertenencias, como en la producción y en la infraestructura vial del país socavada por la enorme masa de agua que ha anegado a nuestro territorio, dejando además unas 677,000 personas afectadas y muchos desaparecidos.

Algunos países de la comunidad internacional sabiendo de nuestra desgracia han contribuido con fuertes cantidades de dinero, que servirá –sino se desvía para otros fines-- para atender la reconstrucción de las zonas afectadas y para ayudar a los compatriotas que necesitan alimentos y medicinas.

Pero mientras esto sucede, el presidente de la República retomará, según se ha conocido, su agenda internacional en medio de estas graves dificultades atendiendo cuestiones más que de Protocolo, que de asuntos de Estado, que los embajadores podrían acometer pues para eso se les paga. El presidente Lobo alzará de nuevo vuelo hacia El Salvador en asuntos relacionados con el Sistema de Integración Centroamericana, SICA, y posteriormente viajará a Paraguay para asistir a la cumbre internacional cuyo tema central será la “Transformación del Estado y Desarrollo”, pretextando para ello según sus palabras que “es importante valorar lo que significa para un país pobre estar en las relaciones internacionales” (¿?). Estos improductivos viajes con numerosas delegaciones se suman a los realizados por don Pepe entre Septiembre y Octubre a Madrid, Miami, Nueva York, Washington, Roma y El Vaticano en medio de la creciente crisis económica que sufrimos y a la constante alza de la criminalidad que vive nuestro país, a la cual no se le vislumbra ninguna solución.

Los internautas que viven fuera de Honduras son muy dados a opinar sobre estos desajustes, uno de ellos comentó en La Prensa digital: “Señor Presidente, se le eligió para gobernar el país, no para que ande de turista conociendo el mundo a costillas del pobre pueblo que paga impuestos, gobernar es cosa seria y así debe tomar con seriedad la gobernanza de este país”.

Los comentarios nuestros salen sobrando.

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